El Ayuntamiento saca a concurso la nueva concesión del autobús urbano
El Consistorio destinará 1,8 millones anuales para compensar a la nueva concesionaria
El Ayuntamiento de Marbella ha presentado el pliego de condiciones básico con el que sacará a concurso la nueva concesión del transporte público, que costará 1,8 millones anuales a las arcas municipales. En este sentido, según detalló ayer la alcaldesa, Ángeles Muñoz, acompañada por la directora de la cátedra de Gestión del Transporte de la Universidad de Málaga (UMA), Elvira Maeso, la nueva empresa adjudicataria tendrá que, entre otras cosas, renovar el 40% de la flota (17 autobuses) al inicio de la concesión y el resto como muy tarde a los seis meses del comienzo del contrato.
Estos vehículos, que no podrán tener más de 10 años, deberán ser adaptados para personas con movilidad reducida, también deberán informar de las próximas paradas de manera visual y sonora, y la concesionaria tendrá que ofrecer toda la información sobre el servicio a través de una página web así como a través de una aplicación para dispositivos móviles.
Al mismo tiempo, insistió en que "no habrá suspensión de ninguna línea actual, en todo caso se podrían sumar, pero nunca restar". En cuanto al coste de las tarifas y bonificaciones, se mantendrán los precios, y a la vez se crearán nuevos bonos "para estudiantes y jóvenes, para familias numerosas y para desempleados de larga duración en el que, en este último caso, los abonos mensuales tendrán una bonificación de un 95% de la tarifa", explicó. También se mantendrán las ayudas a los jubilados y personas con discapacidad.
Muñoz manifestó que, tras la confección del pliego, "con el que se pretende dar solución a los problemas que se han planteado a lo largo de todos estos años", y al que se le incluirán las propuestas de las asociaciones de vecinos, se sacará a licitación pública con el fin de que la concesión esté adjudicada este mismo año. El transporte público del municipio, hasta ahora en manos de la empresa CTSA-Portillo, registra alrededor de 2,2 millones de viajeros al año.
Por su parte, el candidato de Izquierda Unida, Miguel Díaz, calificó esta operación como "una traición a la ciudadanía y a las aspiraciones de desarrollar un modelo de movilidad sostenible en el municipio". En esta línea, sostiene que, a dos meses de las elecciones, "todo apunta a que se trata de dejarle la adjudicación en bandeja a Portillo antes de que se produzca el cambio en el gobierno municipal, como ya realizó el gobierno de Muñoz recientemente con la adjudicación de la estación".
Un saludo portillero
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